Los piratas informáticos están inyectando códigos perniciosos en componentes en las plantas de fabricación en el extranjero, implantando herramientas que les ayudan a lanzar ciberataques en Estados Unidos, dijo el republicano Jim Langevin a Reuters tras hablar en un evento sobre ciberseguridad en Rhode Island.
El problema afecta a los aparatos electrónicos de consumo así como a los sistemas tecnológicos corporativos, que pueden contener datos secretos de empresas y del Gobierno, agregó.
"La corrupción de hardware y software forma parte de la cadena de producción", dijo. "Tenemos un verdadero reto en nuestras manos para mejorar la seguridad de la cadena de producción y distribución", agregó.
Componentes infectados en la cadena de producción suponen una amenaza creciente para Estados Unidos, particularmente en las operaciones militares, dijo Doug White, un experto en ciberseguridad y profesor en la Universidad Roger Williams.
"No es algo en lo que haya pensado mucha gente en el pasado. Deberían haber pensado en ello", sostuvo. Langevin y White hablaron en una rueda de prensa en Providence sobre un nuevo programa estatal para combatir las amenazas virtuales.