Más escándalos ponen en entredicho la reputación del Partido Popular. Después de darse a conocer los seguimientos a políticos del gobierno de la Comunidad de Madrid, hoy el País apuesta por la vinculación de esos hechos a empleados a sueldo de Esperanza Aguirre.
2 informes caligráficos han confirmado que los partes de los seguimiento de los espías fueron firmados por personas de la consejería interior. Por encargo del diario, los peritos han cotejado los documentos de los espías con documentos de personal de la consejería y coinciden en las firmas.
Esperanza Aguirre queda cuestionada de esta manera, primero, porque si es verdad que sabía algo de los espionajes, queda entredicha su capacidad para la sucesión de Mariano Rajoy como líder de partido, segundo, si no lo sabía, permitió que a sus espaldas un asunto tan turbio creciera desorbitadamente sobre algunos de sus compañeros de partido sin evitarlo.