Stéphanie Di Giusto rescata del olvido la "vanguardia" de Loïe Fuller en 'La bailarina'

EUROPA PRESS 03/11/2016 18:50

Según ha señalado a Europa Press con motivo de su visita a Madrid para presentar este filme, la "injusticia" que rodea a la bailarina la empujó a dar a conocer al mundo la vida de este personaje "tan vanguardista y precursor", que fue capaz de transformar su época.

'La bailarina' centra su historia en torno al éxito y posterior declive de Loïe Fulle, la joven que llegó a convertirse en un icono de "la belle époque" y en bailarina del teatro de la Ópera de París, a pesar de las consecuencias físicas de sus prácticas. Su esfuerzo se vio amenazado por la llegada de Isadora Duncan, una bailarina joven que se convirtió en su mayor rival.

"¿Cómo hemos dejado de lado a esta mujer sin tenerla en cuenta?", se pregunta la directora de cine, quien trata de "rehabilitar" su arte para dar a conocer al mundo su contribución al mundo de las artes escénicas.

A su juicio, su "gran contribución" fue su mentalidad, puesto que, en palabras de la cineasta, "veía más allá", lo que le aportó una "auténtica libertad" y un "espíritu de creación" que imposibilita encerrarla en una casilla.

LIBERTAD Y VALOR

Mientras que Duncan triunfó, Fuller terminó en la indigencia. "Es la realidad, lo increíble en ella es que necesitaba toneladas de artificio para mostrar su cuerpo en el escenario, porque es una granjera del oeste americano que no tiene nada para ser bailarina", ha indicado.

Fuller contrasta con "esa mujer de 16 años que lo tiene todo: gracia, juventud y un talento innato". "Se enamoró de ese personaje, de alguien que ella nunca podría ser", cuenta y añade que las dos están enterradas en el cementerio de Pere-Lachaise, en París. Sin embargo, mientras que la tumba de Isabella Duncan es "magnífica, con letras doradas, flores y bien mantenida", Fuller descansa "en un nicho del que han robado su placa, con un número casi borrado, totalmente abandonado".

En cuanto a las actrices, Stéphanie Sokolinski, conocida como Soko, ha aportado "verdad" al personaje de Fuller. Además, la directora ha destacado que posee una "feminidad fuera de la norma, que no se corresponde en absoluto con las chicas lisas que se ve en las revistas femeninas". "Me gustaba su toque punk y revolucionario", ha dicho.

En su opinión, entre Soko y Fuller se produjo un "intercambio" que facilitó cierto "diálogo" y un "intercambio entre ellas". "Es verdadera, alguien que no hace trampas y que iba a llegar hasta el final. No la doblaron en ningún momento en la película, cada imagen donde baila es ella, se entrenó durante meses ocho horas al día y fue hasta el final", recalca.

Respecto a Lily-Rose Depp, hija de Johnny Depp y Vanessa Paradis, quien se mete en el papel de Duncan, Di Giusto ha indicado que hay también una "auténtica verdad" en ella y, a pesar de haber realizado pocos trabajos cuando hizo las pruebas, vio una "gracia, un "abandono innato y algo profundamente moderno".

Preguntada por su pasión por la "belle époque", la directora de 'La bailarina' ha señalado que vio en esta época pasión, valor y libertad, mientras que ahora cree que "nadie tiene derecho a hacer nada". "Estamos perdiendo esta locura y el sentido de la creación", ha dicho.