Así, la compañía gasta actualmente un 37% menos de agua por cada tonelada de producción, en relación a los índices registrados en 2008. Esto representa un ahorro del 78% por cada tonelada de producción, comparado con los indicadores de referencia en 1995.
En este sentido, señala que dentro de tres años la extracción de agua por parte de las fábricas de Unilever será igual o inferior a los niveles de 2008, a pesar de tener volúmenes de producción significativamente más altos. De esta forma, la compañía cumple con el Plan Unilever para una Vida Sostenible, que prevé que en 2020 todas las nuevas fábricas construidas capten menos de la mitad del agua que se extraía hace diez años.
Las plantas de Unilever en China, Sudáfrica, Estados Unidos, Brasil e Indonesia se pusieron en marcha en 2015. Cuando alcancen niveles de producción completa, cada una de ellas tendrá como objetivo extraer solamente la mitad de agua que la que usaban las fábricas hace diez años.
Unilever se ha comprometido también a reducir la cantidad total de agua que utiliza en toda su cadena de suministro, incluyendo el uso que hacen los consumidores de sus productos, en el año 2020. Actualmente, el 35% de la huella hídrica doméstica de la compañía proviene del consumo doméstico para la higiene personal (baño, ducha y lavamanos), mientras que el consumo de la lavadora y el lavavajillas representa el 18%.