Así, ha explicado que por cada SMS que se envíe al número de teléfono que aparecerá en la pantalla gigante que los Cines Callao tienen en la plaza, se realizará un donativo a Unicef, al tiempo que la pantalla se irá apagando poco a poco. Por lo tanto, cuantos más mensajes se envíen, antes se conseguirá el objetivo de que la pantalla se "vaya a negro" por completo.
La acción forma parte de la campaña '#cierraunicef' que la organización ha puesto en marcha con el fin de ayudar a millones de niños en todo el mundo, y así lograr que su labor deje de ser necesaria.