Mata a sus hijos y se suicida por miedo a no ser "la madre perfecta"

cuatro.com 30/07/2011 11:53

Una ex enfermera británica, que sufría de depresión y trastornos psicológicos, estranguló a sus dos hijos, de cuatro y dos años, con sus propias manos. Acto seguido, se suicidó. ocurrió en una pequeña ciudad cerca de Londres en 2007, pero hasta ahora no se había resuelto el caso.

El Daily Mail ha publicado recientemente este triste suceso, que ocurrió hace cuatro años, sin embargo hasta hoy no se había esclarecido. A raíz del duro embarazo del pequeño de los hermanos, Paul, desencadenó una depresión post-parto que le llevaría a este trágico final.

Susan estaba convencida de que sus hijos sufrían varias alergias e incluso enfermedades graves. Eso a ella le atormentaba, ya que había sido una brillante enfermera pediátrica, y las supuestas dolencias de sus hijos, se le escapaban de las manos. Cada vez se sentía más incapaz de protegerles, lo que le llevaba a estar más deprimida.

Paul, de dos años y medio, era un niño sano pero con un parto difícil. Aquello hizo que todo comenzase. Susan creía firmemente que estaba gravemente enfermo, sospechaba de fibrosis quística. Pero lo cierto es que las pruebas médicas revelaron un perfecto estado de salud. El marido de Susan, Richard, salió de la ciudad (Peterborough, Inglaterra) por asuntos de trabajo. Al volver se encontró la terrible estampa de su familia muerta. El motivo de su esposa es que "no era lo suficientemente buena", según señaló una de las psiquiatras. "Ella me dijo que Richard creía que se estaba volviendo loca" "Ella sentía que no era buena madre, y pensaba que tenía que ser todo perfecto".

La pareja se casó en 1999, tuvieron al último de sus hijos en 2004, y, tan solo un año después, Susan ya fue ingresada por una depresión psiótica delirante. Los médicos detectaron también un trastorno neurótico obsesivo, que volcaba en la salud de los pequeños. Otra de las doctoras que trató a la paciente, la vio tan solo una semana antes de morir. Parecía todo normal, no se había observado ninguna recaída que revelara el fatal desenlace.

Aprovechando la marcha de su marido, Susan estranguló a Paul y Joseph con sus propias manos, instantes después, utilizó una cuerda a modo de horca para acabar con su vida. Cuatro años de investigaciones han aclarado hoy éstas muertes