La empresa propietaria del barco, cuyos trabajos de adecuación continúan adelante, debe explicitar todos los extremos técnicos de su plan para trasladar al buque antes de obtener la autorización que se requiere para una operación de estas características. En ellos deberá detallar todos los aspectos del remolque, con especial énfasis a todos los que están relacionados con la seguridad de la embarcación.
En paralelo a la elaboración de ese documento, los operarios contratados por el armador prosiguen sus tareas de acondicionamiento en el interior buque. Este sábado han sido trasladadas a bordo las herramientas que precisan para algunas de las tareas más complejas de cara a la estiba de la carga que permanece dentro, según un comunicado de Marina Mercante.
El Sorrento continúa sujeto por el remolcador Gianemilio C. bajo la vigilancia del buque de Salvamento Marítimo Clara Campoamor, que supervisa en todo momento las operaciones de abordaje que se realizan y la sujeción por parte del remolcador.
Inspectores de la Capitanía Marítima de Mallorca han realizado una nueva inspección exterior del barco y constatado que la situación y flotabilidad del casco continúa sin cambios.