La Amnistía Internacional se ha puesto en contacto con el Gobierno del país para que la menor tenga un aborto seguro. A través de un comunicado publicado el 29 de abril, la Amnistía Internacional ha declarado que si el aborto no se produce, “podría tener consecuencias devastadoras para la salud de la pequeña y sumaría injusticia a la tragedia”.
Ante esta solicitud, Lida Sosa, Directora de la Oficina Programas de Salud, ha contemplado que no se puede considerar la opción de un posible aborto.
"La solicitud es imposible de cumplir porque el embarazo tiene un desarrollo de cinco meses. Ya hablamos de un feto totalmente formado y con un tamaño considerable. Además, el código penal prohíbe esa práctica", ha insistido Sosa.
En Paraguay solo está permitido interrumpir el embarazo cuando la vida de la madre está en peligro. Incluso si el embarazo es fruto de una violación o el feto sufre una malformación, su aborto está penado.
Actualmente la niña permanece en el hospital de la Cruz Roja de Asunción donde los médicos preservan la vida de la niña y el feto, mientras que el Ministerio de Salud de Paraguay valora el caso.