Un millar de 'indignados' ha protagonizado pasadas las diez de la noche una sentada en la plaza de Cibeles después iniciar una marcha desde la plaza de Callao y cortar el tráfico a su paso en Gran Vía y la calle de Alcalá.
Aunque con un menor número de manifestantes que los días anteriores, los 'indignados' han vuelto a expandir por las calles del centro de Madrid su protesta, toda vez que un fuerte dispositivo de la Policía ha impedido de nuevo el acceso a la Puerta del Sol.
En Cibeles, cientos de 'indignados' han celebrado una asamblea en las que se ha debatido cómo seguir con la protesta. De esta forma, ha habido voces que han propuesto llevarla hasta las puertas del Ministerio del Interior, mientras que otras han incitado a realizarlas ante las sedes del PSOE y del PP en Madrid.
Durante la marcha, se han escuchado consignas contra la visita a la capital del Papa con motivo de la Jornada Mundial de la Juventud
La policía carga contra los indignados ante el Ministerio de Interior
La Policía ha cargado varias veces contra los 'indignados' que, tras una asamblea en la plaza de Cibeles, han decidido llevar su protesta ante la sede del Ministerio del Interior en el Paseo de la Castellana
Sol, bajo vigilancia
La Policía Nacional y Municipal de Madrid está permitiendo la entrada a la Puerta del Sol, pero mantiene los accesos vallados y fuertemente controlados, al tiempo que ha bloqueado con cinta policial la zona centro de la plaza. A dos centenares de indignados, que gritaban consignas contra Alfredo Pérez Rubalcaba, les ha impedido el paso. Tras esto, los activistas se han dirigido a la Gran Vía donde han cortado el tráfico.
Como el miércoles, varios agentes se han apostado con furgones y vallas en las entradas al kilómetro cero de Madrid por todas las calles de acceso, permitiendo el paso de los ciudadanos por pequeños pasillos. Asimismo, un helicóptero policial vigila desde el aire.
Las entradas más fuertemente controladas son las de Mayor y Arenal, ya que este mediodía se ha celebrado una manifestación del movimiento 15M desde la Plaza de Oriente hasta Sol. La fuerte presencia de las Fuerzas de Seguridad está provocando que estas céntricas calles no contengan la concurrencia y el bullicio habitual.
Los agentes han impedido el paso a dos centenares de indignados que gritaban consignas como "Rubalcaba, tienes un marrón", "no nos representan" y "esto sí perjudica a los comercios". Tras esto, los activistas se ha dirigido a la GranVía, donde han cortado un carril a la altura de la calle Clavel.
Por otra parte, la Policía ha acordonado con cinta policial la zona de Sol comprendida entre las dos fuentes y la entrada principal del Metro y Cercanías hasta el paso de coches. El objetivo es evitar una posible concentración masiva de manifestantes se concentren en la céntrica plaza.
Con relativa normalidad circulan los autobuses de la Empresa Municipal de Transporte y los taxis, aunque la salida por la calle Carretas está cortada al tráfico rodado. La estación de Metro y Cercanías, en cambio, permanecen cerradas.
Una persona detenida
Por el momento, no se han producido incidentes, salvo la detención de una persona en Carretas. Según han señalado testigos presenciales, minutos después de las 12 horas un hombre de unos 30 años trató de pasar a la Puerta del Sol por dicha calle, lo que no fue permitido por la Policía. Ataviado con camiseta y pantalón negro, enseñó a los agentes su documentación y su mochila y pidió atravesar la plaza alegando que iba a trabajar.
A pesar de ello, no le permitieron entrar, por lo que decidió permanecer sentado en el centro de Carretas, a escasos metros del acceso controlado por los agentes. Como no se levantaba, tres de ellos se acercaron a él, le detuvieron y le apartaron de la vía pública.