Poner en valor el origen de los productos, unificar criterios en el etiquetado y aportar transparencia al consumidor a la hora de comprar son los objetivos del proyecto Origen Español Certificado, una iniciativa emprendedora que busca mejorarla competitividad de los productos y empresas que fabrican en España aglutinándoles bajo un mismo distintivo en el mercado.
La idea ha sido puesta en marcha por dos emprendedores y ya se han sumado a ella diversas empresas como ImasD, que se dedica a la fabricación de tablets, y la empresa que aglutina las firmas de cubertería Cruz de Malta, Meneses y Dalia. Así pues, a través del sello Origen Certificado se identificará, previa auditoria, a las empresas que fabrican en España, frente a la deslocalización también de sus competidores.
Dicho sistema se inspira en experiencias exitosas como la denominación de origen. "Creemos que si a todas las denominaciones de origen y los proyectos que se llevan a cabo de manera parecida, se les junta en una sola imagen, podemos ser muchísimo más reconocibles y muchísimo más competitivos", ha explicado este jueves en Madrid el director de OEC, Javier García-Inés. Más aún cuando en lo que llevamos de 2013 la base exportadora del país a sumado 5.000 empresas, un 8 por ciento más que en 2012, según datos del Gobierno.
Por otro lado, OEC busca dar a conocer a los consumidores el procedimiento y el proceso de producción de lo que consume, frente a algunos casos de información no veraz y confusa que en la actualidad figuran en ciertos productos, detalla el otro socio fundador de esta iniciativa, Vicente Ruíz. A este respecto, el pasado mes de enero la Organización de Consumidores (OCU) publicó una encuesta, según la cual, el 56,9 por ciento de los consumidores españoles consideran el origen de los alimentos es una cuestión de gran importancia.