La víctima estaba esperando en el andén con otra persona, mirando cómo se aproximaba el tren. La mujer saltó en el momento en el que llegó a la estación, según informa NY Daily News.
“No he visto una cosa así en mi vida”, afirmaba uno de los testigos. “Su amiga se dio la vuelta y nunca olvidaré la expresión de su cara… Ella solo miró en estado de shock, igual que estábamos el resto”, señalaba.
Pero no todo el mundo se sorprendió. El teléfono de la víctima se quedó en el andén. En ese momento, un hombre se acercó tranquilamente a recoger el Smartphone y guardárselo tras asegurarse que no estaba siendo observado.
La Policía de Boston está buscando al joven –de pelo oscuro- tras identificarlo en las cámaras de seguridad del metro.