La odisea vivida por los 503 pasajeros del vuelo PLM 7008 comenzó este domingo cuando la aeronave en la que se dirigían hasta Punta Cana, en la República Dominicana, tuvo que darse la vuelta tras tres horas de vuelo por "un incidente técnico".
Los turistas afectados han sido alojados en varios hoteles ubicados en las inmediaciones de la ciudad aeroportuaria de Barajas aunque muchos de ellos han denunciado la falta de atención e información por parte del personal de Pullmantur.
La situación empeoró cuando otros vuelos previstos para este lunes y con el mismo destino caribeño fueron suspendidos afectando casi a mil pasajeros.
En ambos casos también los afectados han sido alojados en hoteles cercanos al aeropuerto aunque las críticas por la falta de información han ido aumentando, lo que ha elevado el malestar con la empresa.
La situación en Punta Cana no es mejor. Allí más de 400 pasajeros permanen en tierra afectados por la aeronave averiada que tenía que trasladarles hasta España.
Se espera que en las próximas horas el vuelo suspendido este domingo pueda salir de Barajas rumbo a su destino tal y como ya ha anunciado la compañía.
Pulmantur, en un comunicado colgado en su página web, ha anunciado que "valorará las compensaciones oportunas una vez se solucione la salida de todos los pasajeros afectados".