La joven británica pero de origen turco dejó el país en octubre de 2014 y fue arrestada en enero después de un vuelo que conectaba Alemania con el aeropuerto de Stansted, según apunta ‘The Mirror’. Antes de marcharse, Silhan Ozcelik le dejó a su familia una carta y un vídeo confesándoles que se marchaba para unirse al PKK.
Sin embargo, la joven ha declarado que todo era una mentira y que en realidad viajaba a para ver a un hombre con el que había estado congeniando. Silham Ozcelik ha afirmado que haber dicho la verdad hubiese sido “una vergüenza en su comunidad”.
En cualquier caso, el jurado ya ha tomado una decisión y ha condenado a Silhan Ozcelik a pasar 21 meses en prisión. Hasta ahora ella ha pasado ocho meses bajo custodia, que se le contará como tiempo de condena cumplido.
El juzgado ha rechazado el recurso presentado para intentar suspender la sentencia y ha acusado a la joven de ser una “estúpida, inútil y profundamente deshonesta” por haber mentido a su familia y a la corte.