A la reunión, que se celebra en la Asociación Española de Abastecimientos de Agua y Saneamiento (AEAS) acuden representantes de España, Estados Unidos, Australia, Canadá y Japón para encontrar un estándar común ya que consideran que el usuario final se encuentra en medio de una situación distorsionada.
El grupo internacional de expertos en aguas residuales desarrolla unas recomendaciones que se basan en los acuerdos conseguidos hasta la fecha dentro de la Organización Internacional de Normalización (ISO) para determinas las características que debe cumplir un producto para que pueda ser etiquetado como "desechable vía inodoro" sin poner en peligro las infraestructuras de saneamiento, los trabajadores que las operan o dañar el medio ambiente.
Las recomendaciones finales apoyarán la 'Declaración sobre la posición del sector internacional del agua respecto a los productos desechables vía inodoro', que se publicó en 2016 y que firmaron más de 300 entidades de 25 países.* El objetivo es que estas recomendaciones sean una herramienta para los fabricantes a la hora de etiquetar de forma adecuada sus productos, que deben "dar a entender de manera clara" que los inodoros no son un cubo de basura.
AEAS, la entidad española participa desde 2014 en el Grupo de Trabajo de la Organización Internacional de Normalización (ISO), donde las entidades gestoras de las infraestructuras de saneamiento trabajan conjuntamente con los fabricantes de productos desechables para intentar definir un estándar internacional.