Oficiales de la Marina acusados de vender información secreta a cambio de orgías

Noticias Cuatro 15/03/2017 17:47

El Departamento de Justicia de Estados Unidos emitió el martes nuevas acusaciones de corrupción contra varios oficiales de la Armada o ex oficiales de la Marina en su extensa investigación "Fat Leonard". Se enfrentan a cargos que incluyen la conspiración, obstrucción a la justicia y aceptar sobornos en forma de alcohol, relojes de lujo, puros y fiestas sexuales con prostitutas a cambio de información militar sensible, según informa UPI.

En este caso está involucrado el contralmirante retirado y ex director de operaciones de Inteligencia de la Marina Bruce Loveless, quien fue arrestado el martes en su casa de San Diego. Pero a él se unen otras 19 personas más también implicadas en el caso.

Estas acusaciones tienen que ver con las actividades llevadas a cabo entre 2006 y 2014. Las prebendas les han llegado a costar millones de dólares a aquellos que contribuían. Asimismo, como aseguran los fiscales, algunos mintieron acerca de la relación que mantenían con el excontratista de defensa Leonard Glenn Francis (Fat Leonard) y quienes además trataron de borrar sus huellas destruyendo pruebas incriminatorias.

Francis utilizaba la información que conseguía para extorsionar a la Marina de Estados Unidos por servicios portuarios a su nombre, Glenn Marine Defense Asia. Una extorsión que rondaría los 20 millones de dólares.

Como informa Sputnik News, los acusados solían referirse a sí mismos como 'Los niños padres', 'La banda de los hermanos', 'La hermandad' y 'El harén del Rey León', mientras que Francis tenía el apodo de 'Rey León'. Asimismo, entre los sobornos especificados por los fiscales hay relojes de 25.000 dólares, cajas de puros de 2.000 dólares, botellas de alcohol de 2.000 dólares y estancias en hoteles elegantes por hasta 600 dólares la noche, e incluso hasta una comida sufragada por Francis en Hong Kong en 2006 que costó 20.435 dólares.

Pero este ex contratista sumó a la larga lista de prebendas las fiestas sexuales salvajes y orgías en buques de guerra navales, que llegaban a durar días.

Ahora Francis está a la espera de la sentencia después de que en 2015 se declarara culpable por fraude. El primo de Francis, cómplice, también se declaró culpable y está cumpliendo una condena de cinco años de prisión.