El proceso por el que ha pasado Julissa no ha sido fácil, ya que ha tenido que someterse hasta 10 operaciones en tres años en el New York Eye and Ear Infirmary of Mount Sinai. Sin embargo, el esfuerzo ha tenido recompensa: actualmente puede leer y ver la televisión con normalidad.
Todo comenzó cuando Julissa estaba en casa con su hijo y su marido, completamente desnudo, empezó a gritar desde la puerta. Marquez sospechó que todo aquello no iba a terminar bien así que llamó al cura y a la novia de su primo para alertarles. Sin embargo, expareja acabó abriendo la puerta de un golpe.
Julissa hizo que su hijo se encerrara la habitación y cuando él entró se interpuso en su camino hacia la habitación del niño. Según explica Julissa para el ‘New York Daily News’, el que fuera su marido decía cosas inconexas y parecía confuso. Esto no impidió, que tumbara a Julissa en el suelo y la apuñalara hasta 30 veces, varias de ellas en la cara. Pocos momentos después, el cura y la novia de su primo llegaron.
Su marido, que fue culpado de intento de asesinato en segundo grado, se encuentra internado en un centro psiquiátrico.