El montañero Aoraki-Mt Cook habría muerto sepultado por la nieve el 16 de septiembre de 1973, según ha publicado el periódico neozelandés The New Zealand Herald.
La familia del escalador, dijo en un comunicado que "vivir con la incertidumbre había sido difícil para ellos y perderlo de forma tan inesperada fue difícil para todos los que lo conocían".
La Policía ha asegurado que continuarán apoyando a la familia y que los restos del joven escalador le serán entregados.
El forense está estudiando si reabrir la investigación que comenzó en su día cuando Aoraki-Mt Cook desapareció.