En un comunicado, la Benemérita detalla que sobre las 21.00 horas, una mujer se personó en las dependencias de la Guardia Civil de Palmanova, para denunciar que su esposo se había encerrado en su vivienda junto a la hija que tenían en común.
La mujer destacó a los agentes que el marido se encontraba bastante alterado debido al consumo de bebidas alcohólicas y por los trámites de separación en que se encuentra la relación de pareja.
Ante ello, se desplazaron al lugar agentes de diferentes unidades de la Guardia Civil, entre las que se encontraba un negociador, quien intentó por diferentes vías ponerse en contacto con el padre, que en ningún momento contestó a las llamadas de teléfono, del timbre de la puerta ni del portero automático.
Sobre las 4.00 horas de la madrugada, en vista que no daba señal alguna, se decidió acceder por la fuerza al interior de la vivienda, para lo que agentes especializados en entradas a edificios derribaron la puerta de entrada, liberaron a la niña y procedieron a la detención del padre.
La niña se encontraba en la misma habitación del padre, en la que ambos se encontraban durmiendo, cada uno en una cama.
Por último, las mismas fuentes han detallado que en ningún momento hubo ningún riesgo para la niña, debido al dispositivo y estudio previo a la que se sometió la operación. Al lugar de los hechos asistió el Fiscal Jefe, el Coronel de la Zona y personal de la Unidad Orgánica de Policía Judicial.