Muchas personas conocen al amor de su vida de las formas más extrañas posibles. Este también es el caso de James Costello que se encontraba en el maratón de Boston cuando las dos bombas explotaron.
En una de las muchas fotografías que se hicieron ese día se le ve a él completamente desorientado y con la ropa destrozada. James tuvo que someterse a numerosas operaciones para poder recomponerle la parte derecha de su cuerpo, hasta el punto que tuvieron que utilizar piel de cerdo para recomponerle el brazo y la pierna derechos.
Tras las operaciones, le llevaron a un hospital de rehabilitación donde se enamoró de la enfermera que le cuidaba y le ayudaba a mejorar día tras día.
Comenzaron a salir y, ocho meses después del atentado, él se declaró y ella le dijo que sí. El pasado sábado 23 de agosto se casaron y ahora, según Huffington Post, James ha explicado que "en cierto modo se alegra del atentado, no quiere que los demás lo hubieran vivido, porque así ha conocido al amor de su vida".