Los hechos sucedieron el pasado domingo, cuando se recibió una llamada en la central de Tres Cantos en la que se alertaba de la necesidad de auxilio a una mujer embarazada en su vivienda. La patrulla más cercana al lugar se acercó al domicilio. Se encontraron a una mujer de mediana edad que había roto aguas.
Los agentes solicitaron ayuda sanitaria urgente e intentaron calmar a la parturienta, colocándola en posición de seguridad y midiendo los tiempos de contracciones hasta que llegaran los efectivos de Emergencias.
Los técnicos sanitarios decidieron trasladarla al hospital pero durante el trayecto, y mientras se encontraban en el rellano de la vivienda, comenzó el parto.
Los agentes colaboraron en las técnicas de reanimación del bebé, que presentaba problemas de respiración. También ataron el cordón umbilical con un cordón de su zapato, hasta que se personó el personal sanitario con medios adecuados para trasladar a la madre y a su hijo al hospital.