Así, al menos cuatro provincias --Lugo, Asturias, Cantabria y Burgos-- estarán en alerta amarilla (riesgo) por viento. En lo que a fenómenos costeros se refiere, estarán en alerta naranja (riesgo importante) Pontevedra, La Coruña, Lugo, Asturias, Cantabria, Vizcaya y Guipúzcoa, que se reducirá a amarilla en Girona y Almería.
En el resto de la península se prevén vientos flojos de componente oeste. En el área mediterránea no andaluza, los vientos serán de componente suroeste y pasarán a ser del norte al final del día.
Además, predominarán los cielos nubosos en la mitad noroeste peninsular, con precipitaciones débiles localmente moderadas, más intensas en Galicia, que se podrían extender, de forma más débil y dispersa, a otras zonas de la península, salvo el área mediterránea, donde al igual que en Baleares y Canarias, estará poco nuboso.
La cota de nieve en la península se situará en los 1.400 metros bajando a los 1.000 en el noroeste; entre los 1.800 y los 1.200 metros en el centro y Pirineos; y entre los 2.000 y los 1.500 en el sur.
Asimismo, habrá posibilidad de algunos bancos de niebla matinales en el interior peninsular y posibles calimas en el este de Canarias.
Las temperaturas diurnas protagonizarán un ligero a moderado descenso en todo el país, salvo en el área mediterránea, donde está previsto que permanezcan sin cambios. En cuanto a las temperaturas nocturnas, también sufrirán pocos cambios.