Una pequeña librería de la ciudad francesa de Burdeos está acaparando todos los likes en Instagram. En las fotografías se pueden observar a los trabajadores posando con sus libros favoritos de manera graciosa y original.
Con esto mantienen a sus más de 21.000 seguidores entretenidos en la red social. Sus fotos descaradas muestran cómo las tapas de libros se adaptan inusualmente bien en los marcos de la vida cotidiana, especialmente cuando reflejan a las personas que las sostienen.
Así los ejemplares parecen cobrar vida en este collage literario. Pero Mollat tiene además una historia nada reciente y es que fue la primera librería independiente en Francia, que abrió sus puertas en 1896 en Burdeos. Un legado cultural que sus empleados reafirman de una forma muy original.