El detenido admitió a la Policía local que había discutido previamente con el fallecido y que al verlo con dos acompañantes aceleró hasta los 90 kilómetros por hora y lo atropelló matándolo e hiriendo a los otros, según ha publicado El Faro de Vigo.
Los agentes sometieron al conductor, que realizó el atropello y se dio a la fuga, a las pruebas de alcoholemia y estas dieron positivo.
El joven detenido explicó que la noche del atropello, el pasado sábado, había peleado con los afectados en un local de la ciudad gallega por un asunto relacionado con ex novias.
Ya a las cinco de la madrugada vio a los tres jóvenes, que ya habían cruzado casi en su totalidad la calle, pero él los embistió con el coche matando a uno de ellos e hiriendo a los otros dos, aunque no de gravedad.
El arrestado admitió que pudo evitar el atropello, pero que él decidió arrollarlo a posta, porque esa noche se habían peleado previamente.
El atropello fue grabado por las cámaras de videovigilancia instaladas en la zona, según fuentes del 112, en las imágenes "queda claro" que el atropello fue deliberado.
La Policía Local le imputa un delito contra la seguridad vial y la Nacional, tres homicidios, uno consumado y dos en grado de tentativa.