El doctor Andrew Johnson, de 64 años, ha reconocido ante el Tribunal de Sheffield, Reino Unido, haber cometido abusos sexuales mientras realizaba exámenes regulares a sus pacientes. el médico buscaba sus senos y tocaba de manera íntima a algunas de sus pacientes, tres de las cuales estaban embarazadas
El pedófilo, que ya fue encarcelado durante 11 años y ocho meses en 2014 después de haber sido condenado por abuso sexual de nueve pacientes entre 1978 y 2006, ha visto ahora como se le aumenta la pena otros dos años y medio en tras ocho denuncias nuevas.
El juez Peter Kelson describió a Johnson como un "depredador sexual" que abusó de la confianza de sus pacientes. Las ocho nuevas denuncias han llegado tras conocerse la condena de Johson en 2014. El médico habría abusado de ellas entre 1978 y 1997, según recoge el diario DailyMail.
Sorprendió el testimonio del abuso a una niña de 12 años que visitó al médico de cabecera por unas manchas en el pecho. La menor contó como Johnson se sentó en su escritorio mientras ella se desnudaba frente a él para luego comenzar a masajear sus pechos con la fuerza suficiente para dejarla incluso con magulladuras. A otra niña de 16 años que estaba embarazada le preguntó si iba a dar el pecho a su bebé: "Debes hacerlo, tienes los pechos bonitos", añadió el doctor.
Una mujer de 29 años contó que fue a la consulta de Johnson para preguntar por métodos de anticoncepción y se encontró siendo masajeada íntimamente mientras ella estaba desnuda en la camilla. "Me quedé allí pensando qué demonios estaba haciendo", contó en el tribunal. Además, "el sólo me miraba y seguía haciéndome masajes. Estaba consternado y conmocionado y le pedí que se detuviera pero me dijo "es un método reconocido de relajación".
El juez destacó el buen trabajo policial que había posibilitado la denuncia de estas nuevas pacientes que de otro modo no habrían podido tener justicia. Ahora este depredador sexual permacerá más tiempo en prisión por haber abusado de su posición de confianza para realizar un delito. Él mismo reconoció ante el tribunal que habían sido tantos los casos de abuso que ni siquiera recordaba la cara de sus víctimas.