El hombre se encontraba bajo custodia policial desde ayer por la mañana en la Unidad de Grandes Quemados del Hospital de La Paz de Madrid, ya que tenía el 50 por ciento de su cuerpo quemado. Se encontraba inconsciente desde que desplomó tras salir herido de su casa y pedir un cigarro.
La explosión tuvo lugar a las 10.30 horas de este miércoles en el número 5 de la calle San Ciriaco. Hasta el lugar llegaron varias dotaciones de Policía Municipal, Nacional, Samur-Protección Civil y Bomberos del Ayuntamiento, que entraron a la vivienda y detectaron un fuerte olor a gas.
En su interior, además del ahora fallecido, se encontraba una mujer hondureña de 32 años con un profundo corte en el cuello. Los profesionales descubrieron que las llaves de gas han sido manipuladas, por lo que todo apunta a que la explosión ha sido intencionada.
La hipótesis principal es que este hombre ha matado a la mujer y luego haya querido suicidarse de esta manera. No obstante, será el resultado de la autopsia el que determinará si se trata oficialmente de una víctima más de violencia de género.