En el reportaje, la hija de Paul DiGiacomo contaba su adicción a la heroína y su vida en las calles de Boston y sus padres que miraban la televisión en ese momento descubrieron que estaba viva.
Meghan DiGiacomo hablaba a cámara contando su historia y su deseo de rehabilitarse. La joven contó que vivía en la llamada 'milla de la heroína', donde se nuclean los adictos y sin techo de la ciudad.
La chica, además, relató cómo había perdido "el amor de su vida" por una sobredosis de heroína.
"Nos habíamos colocado y cuando me levanté él estaba muerto", le dijo Meghan DiGiacomo al periodista, que realizaba el reportaje.
El padre de la joven, Paul DiGiacomo, después de ver el reportaje voló a Boston para encontrarse con su hija y tratar de ayudarla.
El hombre se ha mudado con su hija a las calle de Boston y la chica dice ahora sentirse preocupada por él.
"Lo controlo 100 veces durante la noche", asegura.
La joven ha asegurado su voluntad de rehabilitarse, pero cuenta que siempre lo pospone. "Un día quiero ir y poco después me digo, 'iré más tarde'. soy un procastinador'.