Con tan sólo un año, la joven Ella Peggie, de Queensland, Australia, ha conseguido algo que muchas personas tardan años en hacer, y es encontrar a su alma gemela, que se trata de un cruce de Boston Terrier, Snowy, con una particularidad que la convierte en un compañera perfecta para la pequeña: le falta su pata delantera izquierda al igual que a Ella le falta su brazo izquierdo, recoge el Daily Mail.
Ella y Snowie se han vuelto unas compañeras inseparables después de que la madre de la pequeña, Brooke Hodgson, viera un anuncio en Internet de la Animal Welfare League of Queensland (una protectora de animales local) del cachorro, al cual acababan de operarlo. Hodgson supo desde el primer instante que vio ese anuncio, que ese cachorro sería el compañero perfecto para crecer junto a su hija.
"Sabía que sería perfecta para Ella. Tienen la misma edad, así que tienen tiempo por delante para mantener una larga amistad juntas. Se que Snowy le dará una inyección de confianza a medida que crezca (...). Cuando vea que es diferente o tenga un mal día por ello, podrá ver que no se encuentra sola", asegura Hodgson.
Síndrome de banda amniótica
La pequeña nació con síndrome de banda amniótica, una enfermedad congénita causada por una alteración en las bandas amnióticas (pliegues de las membranas ovulares, las cuales contienen el liquido amniótico y una de cuyas capas se llama amnios), que entrelazan extremidades u otras partes del cuerpo del feto dando lugar deformidades. "Ella es perfecta e igual que otros niños", dice orgullosa su madre.
"Se acurrucan juntas y Ella no para de darle besos todo el tiempo. Cada mañana, Snowy busca a Ella antes de ir a por cualquier otra persona. Es algo precioso de ver. Estoy agradecido de que hayamos podido darle este perro", comenta Hodgson.