Un pequeño gato se había colado en el motor de su coche. El dueño del vehículo se encontró al gato cuando abrió el capó y se dio cuenta de que se había quedado atrapado. Lo que no se explica Steven Goldstraw, el conductor del coche, es cómo pudo entrar dentro del capó y quedarse encerrado allí, ni cuánto tiempo llevaría metido dentro del coche.
Después de sacarlo, le pidió a sus vecinos que le dieran algo de comida y bebida, "No ha comido mucho, supongo que por el susto que tenía encima" explicaba Steven. El problema es que Steven no se podía hacer cargo de él porque a su mujer no le gustan los gatos, así que decidió ver si su vecina podía quedarse con él. Al final,se lo ha quedado ella mientras aparece el dueño del gato. Si no aparece, la mujer lo adoptará y se lo quedará.
Según Mirror no es la primera vez que Steven salva a algún animal, ya que ya ha salvado a algunos pájaros, un zorro y un búho.