Marina Adams, de 44 años, fue atacada dos veces por Alexander Volynets, un inmigrante ilegal que conoció en internet.
Se conocieron a través de una página de citas en internet, antes de quedarse embarazada de su hijo de una relación anterior, pero su relación sentimental duró poco al enterarse que tenía dos pasaportes y residía ilegante en Reino Unido y al mentir sobre su edad. Sin embargo, el secuestrador irrumpió en su domicilió con una granada.
Las agresiones se producían mientras Volynets decía: "si yo no puedo, nadie puede". Durante quince horas, la mujer vivió un infierno en su propia casa, sufriendo agresiones físicas y sexuales. Después de este suceso, Alexander Volynets fue condenado a seis años de cárcel y deportado a Ucrania, donde cumple condena.
Como informa Metro, Marina Adams vive asustada porque teme que vuelva a Reino Unido: "me preocupa que pueda volver. En el fondo pienso, que si lo ha hecho una vez, podría volver a hacerlo". Además, afirma, que si él vuelve al país, ella tendría que cambiar su residencia.
La británica, que nació en Rusia, advierte sobre el riesgo de usar internet: "es una ventana abierta. Se puede encontrar al amor de tu vida o encontrar a alguien como al que yo conocí. No sabes quién está detrás de la pantalla".