Las protestas en contra de las prospecciones petrolíferas se repetirán el próximo fin de semana en Canarias. Las organizaciones ecologistas contrarias a los sondeos para buscar petróleo a 60 kilómetros de Lanzarote y Fuerteventura han presentado hoy una declaración de impacto ambiental contraria al proyecto para tratar de impedir así el comienzo de los trabajos que dependen ya solo de la autorización de Industria. El visto bueno del Tribunal Supremo a los trabajos es el último capítulo de un conflicto que dura ya diez años y que según los detractores del proyecto perjudicaría a dos de los principales intereses de las islas, el turismo y la pesca. Unos perjuicios que ha negado este miércoles el ministro de Industria, José Manuel Soria, defendiendo que el proyecto generará actividad industrial y económica en las islas. El gobierno canario, que también fue a los tribunales para intentar parar las prospecciones, ha anunciado ya que recurrirá la decisión del Supremo y pedirá la suspensión cautelar de los sondeos.