Según ha informado este lunes la policía en un comunicado, las inspecciones se realizaron durante el año 2012 y los primeros siete meses del 2013 en inmuebles regentados por ciudadanos chinos, y que eran usados como "prostíbulos encubiertos".
En la mayoría de los casos, los prostíbulos se anunciaban como saunas de relax o peluquerías, aunque realmente eran lugares "en condiciones de hacinamiento e insalubres", donde se obligaba a las mujeres asiáticas a prostituirse las 24 horas del día.
Las víctimas eran sometidas a un "férreo control de horarios" y debían entregar los beneficios de cada servicio a los encargados del establecimiento, que eran los responsables de su vigilancia y control, han precisado.
GRUPOS ORGANIZADOS
Los 156 detenidos formaban parte de grupos "perfectamente organizados" para la explotación sexual de las mujeres, con una estricta jerarquía y un claro reparto de las funciones, ha explicado la policía.
Cada uno de los integrantes tenía asignada una función concreta, entre las que se encontraban los alquiladores, que se ocupaban de las infraestructuras y alquilaban los pisos que serían habilitados como prostíbulos; los controladores, que vigilaban y controlaban permanentemente a las mujeres y la recaudación, y los dedicados a la publicidad, que se ocupaban de poner anuncios en la prensa, Internet y folletos.
La Policía Nacional también ha detenido a otras 204 personas más por irregularidades en la documentación, a las que se les han incoado los correspondientes expedientes de expulsión de España.