Según ha informado el cuerpo en un comunicado, los hechos ocurrieron el sábado en la B-23 en Molins de Rei (Barcelona), cuando sobre las 04.00 horas patrullas de tráfico que realzaban un control de alcoholemia observaron a un vehículo que circulaba sin el neumático anterior izquierdo.
Después de que estuviera a punto de chocar contra un turismo que se encontraba el control, los agentes le dieron el orden de que se parara pero el conductor hizo caso omiso y huyó.
Dos patrullas lo persiguieron y, pese a que le faltaba un neumático, el conductor circuló a gran velocidad y de forma temeraria, realizando adelantos sin respetar la distancia de seguridad, por la autopista durante ocho kilómetros.
En la AP-7, en El Papiol (Barcelona), los agentes consiguieron pararlo, identificarlo y realizarle la prueba de alcoholemia, en la que dio un resultado de 0,98 miligramos por litro, cuando el límite máximo es de 25, por lo que quedó detenido.
El hombre, vecino de Sant Vicenç dels Horts (Barcelona) y nacionalidad española, quedó en libertad a la espera de la citación del juez.