La investigación se inició en la madrugada del pasado día 4 de agosto cuando varios agentes de la Guardia Civil de Picassent observaron movimientos "sospechosos" de varias personas que circulaban en un vehículo por el área de servicio Torrente-Picassent de la autovía A-7, sentido Barcelona.
Ante el "nerviosismo" de estas personas, se procedió a realizar su identificación y registrar el vehículo, donde los agentes encontraron varios relojes y joyas, además de alicates de corte una barra de hierro, guantes y linternas. Asimismo, en el maletero se descubrió a cuatro canes de diferentes tamaños que estaban hacinados y atados con cuerdas que les oprimían el cuello y que presentaban signos de asfixia y soportaban una elevada temperatura.
Fruto de las gestiones efectuadas con la Guardia Civil, además de la colaboración de la Policía Local de Picassent, se pudo comprobar que los perros pertenecían a una persona que residía en Aielo de Malferif. Posteriormente, se comprobó que se había producido el robo en un chalet y en un almacén de la localidad y los propietarios de los objetos robados los reconocieron, así como el dueño de los perros reconoció e identificó a los animales.
Por estos motivos se procedió a la detención de dos varones de 47 y 58 años de origen español y residentes en Castellón por delitos de robo con fuerza continuados, maltrato animal, y robo y hurto de vehículo a motor. Las diligencias han pasado a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 5 de Torrente.