Este año, la jornada se está centrada en la importancia de la capacitación de la infancia en esta materia. Los niños y niñas son más vulnerables a sufrir accidentes en su vida diaria. Cada año, aproximadamente 950.000 niños menores de 18 años mueren como resultado de heridas o de violencia.
Cerca del 90 por ciento de estas pérdidas se debe a heridas no intencionadas como consecuencia de accidentes de tráfico, ahogamientos, caídas, incendios o envenenamientos. Por ello, Cruz Roja ha apelado a la implicación de las madres y padres para la seguridad también de los menores.
Por otra parte, la organización ha llevado a cabo múltiples campañas informativas en este ámbito, como el 'Súmate a practicar los primeros auxilios. ¡Aprende a prevenir y a actuar', junto con Hansaplast. A través de este proyecto, desarrollado en 24 provincias, se desarrollan talleres con grupos organizados y, a través del 'Tour de los Primeros Auxilios' que recorre 19 provincias, actividades al aire libre en el que tanto personas mayores como niños y niñas pueden participar.
La finalidad de estas acciones es que sus participantes aprendan a prevenir y a actuar ante pequeños accidentes que ocurren en la vida cotidiana, ya que la primera respuesta ante un accidente es fundamental de cara a evitar o reducir la gravedad de las secuelas.