El Congreso se compromete a trabajar contra la discriminación y la violencia contra las niñas y lograr su liderazgo

EUROPA PRESS 19/10/2017 16:57

Así lo ha reflejado la Cámara Baja en una declaración institucional redactada con motivo del Día Internacional de la Niña, que se celebró el pasado 11 de octubre. En el documento, el Congreso también apunta que la lucha contra la violencia de género seguirá siendo una de sus prioridades para que "ninguna niña pase miedo en su hogar, escuela, comunidad o entorno social".

La declaración recuerda que la desigualdad de género se extiende por toda la sociedad y que las niñas y mujeres sufren "inequidad, prejuicios y discriminación cada día" de sus vidas. "Las niñas y adolescentes se esfuerzan para lograr cambios en sus vidas que se frustran por la discriminación, la violencia o la pobreza, a la que muchas de ellas se ven sometidas", denuncia el texto.

No obstante, señala que seis de cada diez niñas viven en países cuyas costumbres las colocan en una situación de desventaja significativa frente a los niños. Así, indica que "las mujeres ocupan, de media, en el mundo sólo el 23 por ciento de los escaños en los parlamentos y ostentan sólo el 5 por ciento de las alcaldías a nivel mundial".

"Es más difícil para las niñas alcanzar escalas de poder cuando, la mayoría de ellas, no puede acceder a la educación o no finaliza sus estudios y, además cargan con tareas domesticas. Las niñas de entre 5 y 14 años pasan 160 millones de horas más que los niños de su misma edad realizando tareas domésticas", apunta el documento, leído durante la sesión del Pleno.

MENOS OPORTUNIDADES QUE LOS NIÑOS

En este sentido, el texto se refiere a un estudio de Plan Internacional, para señalar que el 88 por ciento de las niñas considera que tiene más oportunidades que las que tuvieron sus madres, pero el 37 por ciento reconoce que no puede progresar al mismo ritmo que los niños de su edad.

Así, las mujeres sufren más violencia que los hombres --es la segunda causa de muerte en adolescentes--, mientras que las complicaciones en embarazos y partos adolescentes suponen la principal causa de muerte de menores en todo el mundo. "Una situación, a menudo, impuesta donde ellas no tienen el control de las decisiones que determinan su destino", apunta el documento redactado por el Congreso.

En España, las niñas y adolescentes han señalado como causas principales del sexismo que sufren: la persistencia de roles relacionados con el género, como las tareas domésticas y los cuidados; la cosificación de su cuerpo; y el control al que son sometidas por sus parejas.