El ladrón del camión de butano pasó la noche de fiesta y no había planificado el robo

cuatro.com 22/02/2017 13:19

El hombre había estado de fiesta toda la noche en la capital catalana con otros suecos y no volvió al hotel a dormir donde tenía su equipaje, donde se subió al camión de butano después de haber intentado parar otros coches y robar una moto.

"Fue un camión de butano porque fue el que se encontró, con la facilidad de que tenía las llaves puestas", según ha explicado el conseller de Interior de la Generalitat, Jordi Jané.

El conseller ha insistido en que, cuanta más información tienen los Mossos, más seguros están de que no había un móvil terrorista, y ha añadido que no había hecho ninguna proclama ni nada que les haga pensar en un intento de atentado.

No ha querido detallar qué antecedentes penales tiene este individuo, pero ha dejado claro que no se trata de antecedentes relacionados con el terrorismo.

El hombre está ingresado en la unidad psiquiátrica del Hospital del Mar y se espera el resultado de las pruebas de drogas y alcohol, pero todo apunta a que su "sintomatología alterada" era por la noche de fiesta, en la que visitó varios locales con otros suecos gastando mucho dinero.

DE CONPENHAGE A BARCELONA

El ladrón del camión había llegado a Barcelona la mañana del lunes en un vuelo procedente de Moscú. Al aterrizar en la capital catalana, fue a un hotel cercano a donde al día siguiente robó el camión.

Llegó a Barcelona acompañado de otro hombre, también sueco, y reservaron dos habitaciones en el hotel, aunque luego dijeron en este establecimiento que quería irse el mismo lunes; de hecho, el hombre tenía un vuelo para viajar a Madrid el mismo lunes que finalmente no cogió.

"La estancia en Barcelona le abrió posibilidades de ocio nocturno, de pasar un día diferente, y decidió quedarse y pasar la noche en Barcelona", ha explicado el conseller.

Los Mossos le atribuyen cinco presuntos delitos: robo de vehículo, atentado a agentes de la autoridad, conducción temeraria, lesiones y daños, pero el conseller no descarta que se le puedan achacar otros conforme avance la investigación.

Jané ha elogiado la intervención "eficiente, arriesgada y valiente" de los Mossos y la Guardia Urbana, que interceptaron el camión de butano sin conocer en un principio si podría tratarse, por ejemplo, de una acción terrorista.

"Pusieron en peligro su vida en favor de la seguridad de la ciudadanía", y ha destacado que salvaron la vida de una chica brasileña que cruzaba la plaza Pau Vila con auriculares sin oír el camión y que no murió porque los agentes la apartaron, aunque sufrió lesiones al caerle una de las bombonas de butano.