La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a O.A.C. a 17 años y seis meses de prisión por el asesinato. Además, se ha absuelto al compañero de piso, a quien el Ministerio Público solicitaba un año de prisión por encubrimiento, al entender que en su caso concurre la eximente completa de miedo insuperable.
El acusado de matar en enero de 2012 a su novia a martillazos y tirar su cadáver a una alcantarilla en la localidad madrileña de Pinto, admitió en el juico que solo empujó a la chica tras una discusión y que se deshizo del cuerpo de la mujer cuando al volver de comprar, su compañero de piso le alertó de que la mujer estaba muerta.
“Fue un percance. Yo jamás la golpeé con un martillo. Nunca la maltraté”, aseguró el sospecho en el juicio.
Según el fiscal, como recoge la sentencia a la que ha tenido acceso Europa Press, el acusado mantenía una relación sentimental con la mujer, la cual vivía con sus padres hasta que en septiembre de 2011, comenzó a vivir con el condenado.
El día en el que ocurrieron los hechos, el 25 de enero de 2012, O.A. acabó con la vida de su pareja sentimental con un martillo con un mango de madera al que le propinó un fuerte golpe en la parte de atrás de la cabeza, provocándole una fractura craneal, causando la muerte instantánea.