Chris Salvatore, de 31 años, se mudó hace cuatro a Los Ángeles. Allí conoció a Norma Cook, su nueva vecina, que por aquel entonces tenía 85 años. Desde aquel entonces, la relación entre ambos se fue haciendo cada vez más estrecha.
A sus ahora 89 años, Norma tiene serios problemas de salud y los médicos le avisaron de que necesitaría asistencia las 24 horas del día. La mujer únicamente recibe un cheque mensual que casi no le llega para pagar el alquiler, por lo que no podía contratar a nadie para que la cuidara.
Su última voluntad era pasar lo que le queda en su casa junto a su gato. Por ello, Chris inició una campaña crowdfunding para que Norma pudiera disfrutar de los cuidados que merecía. La campaña fue todo un éxito y ha alcanzado los 60.000 dólares. La asistencia profesional a domicilio cuesta unos 3.500 dólares semanales, según informa 'Hoy'.
Además, Chris ha optado por llevarse a Norma a su apartamento. “Norma y yo hemos decidido que venga a vivir a mi apartamento. Trabajo la mayor parte del tiempo en casa, así que puedo cuidar más de ella. Ella es mi abuela adoptiva después de todo y yo soy su nieto que nunca tuvo. Aunque todavía van a seguir viniendo médicos y enfermeras a ayudar", ha afirmado.