Los furtivos saben muy bien lo que hacen. Pero hay quien conoce el monte mejor que ellos. En 2013, la Guardia Civil detuvo a más de 200 personas y puso cerca de 11.000 multas por delitos y faltas relacionadas con la caza furtiva. Es un negocio lucrativo al que muchos recurren en tiempos de crisis, aunque no todos lo hacen por dinero. Hay quien se ve más atraído por el morbo de lo ilegal. Roberto Arce ha viajado hasta la montaña palentina para acompañar al SEPRONA en una noche patrulla.