El cuerpo sin vida de esta persona, un hombre de origen ruso de 45 años, ha sido hallado flotando en el agua, en el marco del dispositivo activado esta mañana por tierra, mar y aire en la costa granadina para localizar al hombre desaparecido tras la crecida del agua, según han informado a Europa Press fuentes del 112 y de la Guardia Civil.
Este hombre convivía en condiciones infrahumanas con otros dos de los fallecidos por la riada, dos lituanos de 50 y 63 años, en un colector junto a los invernaderos de Albuñol que se anegó por la riada, según han explicado desde el Instituto Armado, que cree que las víctimas se encontraban allí cuando les sorprendió la crecida, la cual arrastró sus cuerpos varios kilómetros.
En el mismo colector vivía una mujer que "se salvó" porque salió antes de que cayera la tromba de agua para visitar a una amiga y comprar comida, según avanza la prensa local.
Junto a estos tres inmigrantes, la riada del lunes se llevó la vida de un hombre de 61 años que fue arrastrado en el interior de su vehículo en Polopos-La Mamola (Granada) cuando se encontraba en una rambla de este municipio.
El fallecido estaba trabajando de guarda en una zona de recogida de plásticos de invernaderos, en la Rambla del Trigo. Con la tromba de agua decidió refugiarse en el coche, que sin embargo fue arrastrado por la riada.