El objetivo de Bruselas con este texto es facilitar el cumplimiento, por parte tanto de los suministradores como de los destinatarios de alimentos, de los criterios que establece el marco legal de la UE en materia de seguridad e higiene alimentario o aplicación del IVA, entre otras cuestiones.
Además, el Ejecutivo comunitario pretende que estas directrices impulsen una interpretación común de las reglas europeas sobre redistribución de alimentos por parte de las autoridades nacionales de los Estados miembros.
El documento de la Comisión Europea se inscribe dentro del plan de acción para la Economía Circular, cuya meta es aclarar la legislación europea sobre esta materia y ayudar a levantar barreras a la donación de alimentos.
El comisario de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, ha destacado en un comunicado que en la UE se redistribuyen alrededor de 550.000 toneladas de comida a 6,1 millones de personas gracias a bancos de alimentos, aunque ha añadido que trata únicamente de una "porción" del volumen estimado que se podría repartir para luchar contra el desperdicio de alimentos y la pobreza alimentaria.
"Estoy convencido de que las orientaciones adoptadas hoy no sólo ayudarán a la industria y a organizaciones de caridad a hacer más fácil su trabajo y así ayudar a los más necesitados, sino también se convertirán en una referencia para las autoridades nacionales y operadores para facilitar la donación de alimentos en la UE", ha confiado el comisario lituano.