Un equipo de científicos del Hospital General de Seúl, en Corea del Sur, ha encontrado varias encimas que pueden ser extraídas en la sangres de una mujer embarazada y que pueden ser un indicador del sexo del bebé a partir de la quinta o sexta semana de embarazo.
Los autores del estudio, encabezado por el Doctor Hyun Mee Ruy, han asegurado al diario británico Daily Mail, que es importante conocer el sexo del bebé pronto, si la madre es la portadora de un gen en el cromosoma X que podría causar males como la distrofia muscular o la hemofilia.
Sin embargo, el equipo de científicos advierte de que 'este método podría promover la selección de sexos. Por tanto, deberíamos ser muy cuidadosos en el uso de estas técnicas de análisis'.
Actualmente, en Reino Unido, los test actuales para conocer el sexo del bebé no se realizan hasta la semana once de gestación ya que hay mayor riesgo de aborto porque requieren realizar una amniocentesis y sacar líquido amniótico. Tampoco las tradicionales ecografías permiten conocer el sexo del bebé hasta el segundo trimestre del embarazo.