Enfundado en un traje naranja de preso, un niño de nueve años está siendo juzgado por disparar accidentalmente a una niña en clase. Amina Kocer-Bowman, de ocho años, lucha por su vida después de que su compañero de clase le disparara con un arma en una escuela de Washington. La niña se encuentra en estado crítico en el hospital tras ser operada para extraerle la bala alojada en su estómago. El niño fue arrestado y hace frente a los cargos de posesión ilegal de un arma de fuego, llevar un arma peligrosa a la escuela y asalto en tercer grado.
Según Dailymail.co.uk, la policía cree que el incidente en Bremerton, cerca de Seattle, fue accidental. Explican que el niño llevó un arma del calibre 45 que encontró en la casa de su madre a su colegio en Bremerton. El arma se disparó accidentalmente desde su mochila antes de que empezaran las clases, hiriendo gravemente a su compañera Amina Kocer-Bowman en el abdomen y el brazo.
Cinco días antes, el niño le dijo a un compañero que iba a llevar a clase el arma de su padre y escapar. La pistola se disparó cuando el niño depositó su mochila sobre su pupitre.
El niño fue llevado a un centro de detención juvenil después de que su fianza se fijara en 50.000 dólares durante la audiencia preliminar.
Los oficiales del juzgado se llevaron al niño después de la audiencia, después de que su padre le abrazara y le diera un beso mientras ambos lloraban.
El padre del niño, Jason Cochran, dijo a la salida del juzgado que “quiero que todo el mundo sepa que mi hijo cometió un error. Fue un error terrible”.
Si la fianza se paga, el chico sería puesto bajo custodia de su tío y bajo arresto domiciliario. Su tío, Patrick Cochran, es el tutor legal del niño y también estuvo sentado junto a su sobrino en el juzgado.
“Es un buen chico. Es lo único que puedo decir”, dijo Patrick Cochran. “Pido perdón a la familia de la chica. Realmente lo siento”. Y añadió: “Sólo quiero que vuelva a casa”.
En dos semanas, una nueva vista determinará si se estima el caso. Bajo la ley estatal, los niños entre 8 y 12 años pueden hacer frente a cargos si el juzgado determina que el niño tiene la capacidad de entender si un acto está mal.
Tanto la madre como el padre del niño tienen antecedentes. La madre, Jamie Lee Chaffin, demandó al padre por no pagarle la pensión del hijo. En 2005 fue arrestada por posesión de metanfetaminas. También fue declarada culpable de traficante de marihuana y de falsificación.
Según Patrick Cochran, el niño fue adoptado por su abuela pero ésta murió hace un año, por lo que él se convirtió en su tutor legal. Explica que vive con el padre del niño y las dos hermanas de éste.