El tribunal de Buraydah, capital de la provincia de Qassim, sentenció uno de los acusados a 10 años de cárcel y 2.000 latigazos, y otro a siete años de prisión y 1.200 latigazos, según publicó el periódico Al-Sharq.
Los otros dos estarán en prisión durante tres años y recibirán 500 latigazos cada uno.
Los jueces determinaron que los 'bailarines' desafiaron las normas de la sociedad y violaron la moral pública''.
Arabia Saudí aplica una versión estricta de la ley sharia islámica que impone muchas restricciones sociales y prohibiciones al entretenimiento público.