En el mundo de la repostería Halima intenta salir de otra realidad más amarga. La concursante de ‘Deja sitio para el postre’ llegó al programa como una aspirante desconocida más pero pronto reveló que esta oportunidad le puede sacar de una situación económica muy complicada. Ni ella ni su marido tienen trabajo por lo que no pueden pagar su hipoteca. Después de su primera aparición en el programa, la entidad que le prestó el dinero se ha puesto en contacto con ella para que reanude los pagos, pero su situación solo cambiará si gana el concurso y recibe los 18.000 euros de premio.