Este es el tercer año consecutivo en el que la división entre los partidos políticos marca el desarrollo del 'Día de la Memoria'. Las discrepancias se deben a que mientras que unas formaciones consideran que la jornada debe servir para honrar no solo a los damnificados de ETA, sino también a los afectados por otras formas de violencia, el PP y UPyD estiman que este formato puede "diluir" la responsabilidad de la banda.
Durante el homenaje, celebrado junto a la escultura en memoria de las víctimas instalada frente al Parlamento vasco, en Vitoria, la presidenta de la Cámara, Bakartxo Tejeria, ha leído una breve declaración.
El texto, un extracto de una resolución parlamentaria aprobada en la pasada legislatura y ratificada en ésta, indica que "la paz y la convivencia futura requieren el reconocimiento de la injusticia de la violencia, el reconocimiento del daño causado y de la dignidad de las víctimas, todas ellas merecedoras del derecho a la verdad, la justicia y la reparación".
Pebetero
La ceremonia, que ha durado unos pocos minutos, ha consistido en una ofrenda floral y en la instalación de un pebetero junto a la entrada de la sede del Legislativo, cuya llama permanecerá encendida a lo largo de todo el día en memoria de las víctimas.
En el acto, además de la propia Tejeria, ha participado el lehendakari, Iñigo Urkullu, así como otros representantes del PNV y dirigentes de EH Bildu, como Laura Mintegi, o el PSE, como Natalia Rojo.
Además de la ofrenda floral del Parlamento vasco, otras instituciones celebran sus propios actos con motivo del 'Día de la Memoria', fijado el 10 de noviembre por ser ésta la única jornada del calendario en la que no se ha registrado un atentado mortal de ETA. De esa forma, el Gobierno autonómico, las instituciones forales de Álava y Guipúzcoa, y diversos ayuntamientos han programado sus propios actos para este domingo.