La Guardia Civil ha detenido a 101 personas por organizar enlaces fraudulentos para regularizar a inmigrantes. La organización encargada de concertar estos matrimonios de conveniencia explicaban a los interesados cómo debían de comportarse ante los funcionarios para no levantar sospechas y realizar con éxito un trámite sencillo que apenas dura media hora de duración.
De esta forma, concertaron hasta 70 matrimonios fraudulentos. Los pretendientes eran hombres marroquíes que querían regularizar su situación, motivo por el cual pagaban entre 5.000 euros y 10.000 euros para materializar el enlace.
"En Marruecos eran captados desde Tánger y Casablanca, que eran lugares de residencia natural del cabecilla de la organización. El resto de marroquíes estaban desperdigados en territorio nacional", tal y como informa la Guardia Civil.
Las novias, por su parte, eran mujeres españolas a las que se contrataban 'empresas pantalla' para ser dadas de alta en la seguridad social. Recibían 1.500€ por esta unión.
De este modo, los inmigrantes eran empadronados en sus viviendas hasta que obtenían la tarjeta familiar de miembro de la Unión Europea y después desaparecían de sus vidas.