Cuando la familia Silver se dio cuenta de que Sophie había desaparecido, inmediatamente se pusieron a trabajar tratando de encontrarla.
Albert Silver escribió en Twitter con la esperanza de que algún amigo o vecino lograse encontrar a su perra. El mensaje fue compartido más de 2.000 veces. La movilización fue tal que muchos se ofrecieron como voluntarios para encontrar a Sophie.
Después de cuatro días buscando sin ningún resultado, Albert Silver comenzó a temerse lo peor. "Estábamos bastante convencidos de que ella había ido a un lugar donde morir", ha asegurado.
Según recoge People, justo cuando parecía que se había perdido toda esperanza, alguien vio la cabeza de Sophie sobre la nieve. De alguna forma el perro se enterró en la nieve cerca de la casa de los Silvers y sobrevivió cinco días atrapada en ese lugar.
Los Silvers sacaron rápidamente a Sophie y después la llevaron al veterinario, donde les comunicaron que estaba en buen estado aunque había perdido bastante peso. La familia Silver está agradecida por todos los que ayudaron en su búsqueda de Sophie, especialmente aquellos que no conocían al perro personalmente.