El sueño más grande de un chófer de Uber se ha hecho realidad, en gran parte, gracias al buen hacer de la sociedad estadounidense. Hay veces que se necesita un empujón, aunque el que ha recibido Ellis Hill le ha llevado a Río de Janeiro para ver a su hijo competir en los Juegos Olímpicos.
Ellis Hill es un humilde conductor de una empresa de transportes que trabajaba día y noche sabiendo que en agosto su hijo Darrel Hill iba a defender a Estados Unidos en la modalidad de lanzamiento de peso masculino en Río y, desgraciadamente, él no lo podría presenciar en directo. Un sueño familiar que una vez cumplido debería ver desde la televisión debido al alto coste económico que suponía el viaje.
Sin embargo, un día su suerte cambió. En uno de los múltiples viajes que hacía Hill conoció a una pasajera con la que charló distendidamente y le contó que su hijo había sido seleccionado para ser uno de los competidores estadounidenses en Río de Janeiro. La chica, Liz Willock, quedó asombrada con la noticia, aunque más cuando le confesó que no podía ir a verlo. "En ese momento, ella me preguntó si iba a ir. Le dije que no me lo podía permitir", confesó el conductor a CBC. Pero entonces, en ese momento, comenzó a gestarse el viaje hacia Brasil.
A la mañana siguiente, Liz Willow creó una campaña de recaudación de fondos para que los usuarios de internet donaran dinero para que Ellis Hill pudiera cumplir su sueño. "Estaba devastada. Aquí está este maravilloso hombre que tiene una relación estrecha con su hijo y sé que cualquier padre quisiera ver a su hijo competir en los Juegos Olímpicos", afirmaba a la revista People. La noticia triunfó en las redes sociales y el 'crowdfunding' creado por la pasajera en Gofundme tocó la fibra sensible de los estadounidenses que no dudaron en aportar dinero para que Hill cumpliera su sueño.
La meta era conseguir solamente 1.500 dólares, pero en muy poco consiguió reunir 8.200 dólares. Una increíble historia humana la que ocurrió entre Hill y Willow, ahora sí podrá ir a ver a su hijo competir al máximo nivel y luchar por una medalla. "Dios es bueno. No puedo esperar a verlo, animarlo en persona y hacerle saber que estoy al 100% de su lado".
El atleta Darrel Hill ha querido agradecer este tremendo apoyo en su red social y publicar un tuit en el que da las gracias a todos los que han hecho posible el desplazamiento de su padre a Río de Janeiro. Un padre y un hijo que se finalmente se reencontrarán en Brasil después de estar meses sin verse debido a los estrictos entrenamientos del joven deportista.