Un todoterreno irrumpió entre la multitud en un estrecho sendero del bosque y provocó la estampida. Los trabajos de rescate de las víctimas se han visto complicados por lo aislado de la zona y la dificultad del terreno donde se produjo la tragedia. Tanto el primer ministro indio, Manmohan Singh, como la presidenta, Pratibha Patil, han expresado sus condolencias por lo sucedido, y anunciado compensaciones económicas para las víctimas.
Según la agencia india IANS, a la zona se desplazó un equipo de 60 médicos que está realizando autopsias a los peregrinos fallecidos, después de que los familiares intentaran identificar a sus seres queridos.
Las estampidas, desafortunadamente, no son un fenómeno extraño en las concentraciones multitudinarias de las celebraciones religiosas hindúes. La falta de control y de organización adecuados para gestionar las grandes aglomeraciones de estas peregrinaciones se unen a la precariedad de infraestructuras y medios que rodean los lugares de culto.